Capitulo 3: Un nuevo comienzo

 

Más tarde vi como Louis se alejaba junto con su familia, que llevaban ya las maletas preparadas, los vi marchar de lejos, y eso duele.


*Fin del flash-back*


Al poco tiempo de que pasara eso por mi mente, pude notar que lo que de repente me imaginé era lo mismo que soñé la noche anterior. No andaba con ánimos para volver a recordar la marcha de mi amigo, y menos por las noches que es cuando más sensible me encuentro.

Intenté despejar mi mente, cosa que vi bastante complicada, pero que aún así conseguí. Mañana por la mañana me despediré de todo esto, pero da igual, tampoco creo que me echen de menos, ya comenté que lo que tenía en mi instituto eran "amigos". No quiero parecer insensible pero lo único que echaré de menos de todo esto será simplemente mi casa, nada más.

Tras pasar unos 20 minutos más o menos, conseguí quedarme dormida.
Me desperté en varias ocasiones, se podía notar que en el fondo, aunque me costara admitirlo, estaba nerviosa. Una gran tontería al tratarse de alguien que se pasa la vida viajando.

No soñé con nada en especial, prefiero que sea así. Porque para volver a pasarlo mal, es mejor no soñar con nada.

Miércoles, 1 de julio, 06:00 a.m día del viaje.

Lo primero que me despertó en el día de hoy fue un golpe de almohada en la cara por parte del madrugador de mi hermano, no creo que sea una buena forma de comenzar el día por mi parte.
No sé cómo consigue levantarse tan temprano sin dificultad, esa costumbre siempre la ha tenido desde pequeño, es por eso que es el que menos duerme de la casa, pero la gran ventaja es que en las mañanas de colegio no le costaba nada comenzar el día. Yo en cambio soy todo lo contrario, bastante dormilona.

(Harry) Venga, despierta dormilona. -Me golpea con la almohada-

(Yo) ¡Para! estaba dormida.

(Harry) Agradécemelo, si no fuera por mí te podrías quedar dormida todo el día. Venga levanta.

(Yo) No hay ganas...

(Harry) Cabeza hueca... ¡hoy vamos a Londres! Vamos, que mamá nos regañará.

Me costó levantarme, pero lo conseguí, el logro del siglo.

(Mamá) Venga, desayunad rápido, son las 6:10 a.m, en 50 minutos tenemos que estar en el aeropuerto.

(Papá) Las maletas están en la puerta, revisad que tenéis todo lo necesario y que no os falta nada.

Desayunamos rápidamente, pero el más rápido sin duda, mi hermano, era muy comilón, no creo que nadie lo supere.

Después de eso, nos vestimos. Yo me puse esto:

En breve lo revisamos todo. Telefonos móviles, auriculares, maquillaje etc...

(Harry) Tn, toma las nintendos, y así jugamos durante el viaje.

(Yo) Claro... las nintendos que no falten... -suspiré- Venga, dámelas, las guardaré.

Íbamos muy justos de tiempo, así que debíamos aligerar, mi padre cerró bien toda la casa, y fuimos al centro de la ciudad, que era donde se encontraba el aeropuerto.

Llegamos muy rápido, faltaban unos 10 minutos para que comenzara el vuelo.

Mientras que estábamos por el aeropuerto, recibí una llamada, ¿quién me va a llamar ahora?, no tenía ganas de contestar al teléfono, pero no tenía otro remedio..

(Yo) ¿Sí?

(Lorena) Hola, Tn

(Yo) ¿Quién eres?

(Lorena) Yo, Lorena, tu compañera de clase, me han dicho que ibas a Londres ¿no?

(Yo) Sí, así es.

(Lorena) Bueno, que espero que te lo pases bien allí en verano, chao.

(Yo) Vale, gracias. -Colgué-

Sin duda era ella, se le notaba al segundo que era su voz. No es una amiga, es simplemente la única compañera de clase que se me acerca un poco. Me sorprendió un poco que me llamara, ¿pero como iba a saber del viaje? Bueno, da igual, no me complicaré con eso. Al menos alguien que se "preocupaba" por mí. 

¿Y donde diablos se ha metido Harry? Habrá dado una vuelta por aquí. Es que nunca para. Al poco tiempo de preguntarme dónde estaba lo vi llegar.

(Yo) ¿Dónde estabas? Vamos, el avión saldrá en breve.

(Harry) Vale, cálmate.

(Yo) Estoy muy calmada, ahora apresúrate si no quieres que nos quedemos aquí estas vacaciones. -Le repliqué-

En cuestión de segundos pasamos por el control de seguridad etc... Y subimos al avión.

Ya estaba bastante acostumbrada a esto de los aviones, para mi eso no era nada nuevo.

Me senté al lado de Harry.

(Yo) Bueno, a Londres -dije con un tono apagado-

(Harry) Vamos pon más ganas, anímate. Sonríe! -después de decir eso puso sus dedos sobre mi boca para hacer que "sonriera"-

(Yo) No hay ganas Harry. -Le aparté la mirada y me quedé observando por la ventanilla del avión como todo se iba haciendo cada vez más pequeño-

(Harry) Ojalá algún día vuelvas a ser tan alegre como antes -una vez más me volvió a decir lo mismo de hace unos días-

(Harry) Tn, cuéntame algo, me aburro.

(Yo) No sé, no hay gran novedad, simplemente me llamó Lorena, me dijo que ojalá me lo pasara bien allí en Londres.

(Harry) ¿Te llamaron? ¿y no estás alegre por eso? quiero decir... como en el instituto no tienes mucha compañía, creo que deberías estar contenta porque alguien se acordó de tí.

(Yo) Fue solo una persona Harry, tampoco voy a darle importancia. -Seguía con la mirada en dirección a la ventanilla-

(Harry) Ah, ya veo -miró hacia el suelo-

*Narra Harry*

Me daba pena lo triste que andaba siempre Tn, y creo que eso debe ser porque se sentirá sola, la falta de cariño juega muy malas pasadas, y más en ella, que es bastante sensible. Por eso decidí llamar a Lorena, que era la única que se acercaba algo a Tn. Ella era mi ex, hace tiempo yo salía con ella, así que tenía su número, por lo que aproveché eso para llamarla.
Le pedí que llamara a Tn, y que le deseara que se lo pasara bien en Londres.
Si alguien la llamara supongo que de esa forma no se sentiría tan sola y podría verla sonreir. Llamé a mi ex, cosa que no me hacía demasiada gracia, hice eso simplemente para volver a ver a mi hermana con otra sonrisa. Pero ví que no dió resultado, apenas le importó la llamada. Me sorprendió tanta frialdad por parte de Tn, ella no era así. Hice un esfuerzo en vano. Haría cualquier cosa por ella. Da igual lo que me pidiese, yo se lo daría todo con tal de verla contenta. No pensé que costara tanto.

*Termina Harry*

*Vuelve a narrar Tn*

No iba a darle importancia a una simple llamada, qué tontería, solo ella me llamó y tampoco sé como demonios podía estar enterada sobre el viaje.

Me puse los auriculares con música. Cerré los ojos y aproveché para recuperar esas horas de sueño que me hacían falta.

Al cabo de 2 horas llegamos al aeropuerto Heathrow de Londres.

Harry me despertó a lo justo, un poco más y me habría quedado allí.

Aquello era increíblemente grande. No sería como New York, pero era asombroso.

Andábamos un poco perdidos por allí. El que mejor nos guiaba era nuestro padre.

(Harry) Bueno, ahora irémos al hotel si no me equivoco.

(Papá) No, ahora tendremos que ir a la estación de tren.

(Yo y Harry) ¿Por qué? -repetimos lo mismo al mismo tiempo, parece que nos entendíamos bien-

(Mamá) Porque irémos a Doncaster.

(Yo) ¿Doncaster? ¿Qué es eso? Nos dijiste que en Londres y en Londres nos quedamos -me crucé de brazos-

(Papá) Vamos, ¡A Doncaster! -ignoró mi comentario, seguido de esto, Harry no tuvo más remedio que jalarme del brazo y llevarme junto a él-

Yo andaba con ilusión de quedarme en Londres, y al final solo pisamos este lugar para ir del aeropuerto a la estación de tren para ir hacia...¿Doncaster? creo que se llamaba así, no escuché ese nombre en mi vida... pero en fin, si no hay otro remedio nos tendremos que aguantar, no hay otra alternativa.

Nos quedamos unas horas en Londres, ya que nos enteramos de que el próximo tren hacia Doncaster salía a las 8:00 p.m

Al menos conseguimos quedarnos gran parte del día allí. Pasamos cerca del Big Ben y visitamos más sitios, ¿sabéis sobre esos autobuses rojos de Londres? Nos llegamos a montar en esos autobuses. También vimos algunas cabinas rojas de por allí, era precioso. ¿Cómo será Doncaster? No le daba el más mínimo interés, pero ¿Y si está bien? Bah, no creo que eso sea tan maravilloso como Londres.

Eran ya las 7.20 p.m del miércoles, 1 de julio, este era el 10º día de las vacaciones de verano.

Por la hora que era decidimos dirigirnos hacia la estación.

(Harry) ¿Estás mejor?

(Yo) Sí -mentí, no mejoré todavía, pero no iba a decirle la verdad, no quiero estropearle el día, me sentiría bastante mal conmigo misma y no me lo perdonaría, él hace demasiado por verme bien-

Solo con decirle un "sí" me sonrió, y yo saqué una falsa sonrisa. No tenía otra que fingir.

Ya solo faltaban 10 minutos para la salida del tren.

(Harry) Papá, ¿y por qué nos vamos a Doncaster y no nos quedamos aquí en Londres?

(Papá) Veréis niños, llevaba algo de tiempo buscando una casa en verano para alquilar en Londres, pero me dijeron que no quedaban, y me ofrecieron Doncaster como una buena opción, por eso nos vamos allí.

(Yo) Creo que nos aburriremos más que una ostra, no creo que ese lugar tenga gran cosa para distraernos.

(Mamá) Ya intentaremos como sea que no os aburráis.

El tren ya llegó y nos montamos, fue justo en ese momento cuando Harry me pidió la nintendo porque quería jugar con los Pokémon... mi hermano de 16 años todavía juega a los Pokémon, es más crío que yo.

Una señora mayor le miraba molesta.
Parecía que le molestaba la musiquita de los Pokémon, le comprendo señora...

Después de una hora llegamos a nuestro destino.
Eran ya las 9.00 p.m un día demasiado agotador. 
Sigo igual de deprimida, ni Londres ni Doncaster ni tonterías, no volveré a ser la misma chica alegre que era antes, eso no pasará jamás. Solo necesito estar sola, escuchar música, olvidarme del mundo y desahogarme, ojalá lleguemos pronto a esa casa alquilada. Como le echo de menos...








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 Aquí tenéis el 3er capítulo, que tras un montón de dificultades lo conseguí terminar. No me preguntéis las dificultades, es una historia muy larga... Bueno, ojalá Tn consiga recuperarse, aunque claro, perder a una persona tan querida afecta mucho, todos perdemos a alguien y a Tn eso se le quedó marcado hasta día de hoy.

"La vida se encarga de ponernos en el mismo camino y luego de separarnos. Cuando estamos con las personas que amamos nos sentimos muy felices de compartir buenos momentos pero cuando el destino nos aleja sentimos un poco de tristeza por su ausencia."